Design a site like this with WordPress.com
Per començar

Divendres 28 de maig de 2021

TEMA: “DUELO POSPUESTO O  RETARDADO”

    INTRODUCCIÓN:

   Estos días mirando, observado, y queriendo entender a todos en su proceder, no me es nada fácil.

    Esta vida que me ha tocado vivir, la quiero entender como las caras de una moneda. Si así lo hago entiendo que una pandemia  no nos va a hacer cambiar si “somos unos cara y otros cruz, en esta vida”.

    Además, si siempre ha sido así, ¿qué puedo esperar de esta sociedad que vivo? Simplemente que parte de ella repita desde siempre las actuaciones de miles de años.

   ¿Para qué escuchar las recomendaciones? ¿Para qué pararse a entender que, trabajando juntos, tenemos más probabilidades de solucionar los problemas de unos u otros? Y sigo preguntándome ¿para qué soñar? ¿Qué podemos cambiar? ¿Tenemos tiempo para pararnos y entender que no del todo lo estamos haciendo bien?

   Demasiadas preguntas, en un tiempo incierto y largo en vivir.

   El ser humano es único e irrepetible y parece ser que nos creemos eternos en un mundo que, al nacer, muchos dicen:”que venimos con un pan bajo el brazo”. ¡Pues no! Simplemente venimos desnudos y con dos billetes: uno de ida y el otro de vuelta. Pero esto es filosofía barata, no vende.

    Me diréis para qué reflexionar, si la vida es más fácil. Lo siento, no lo es y así día tras día, mirando las actuaciones de nuestra sociedad, me acuerdo de la moneda y sus caras.

    Sí. Por un lado, nuestra Sanidad agotada. Nuestros científicos, nuestros hombres de bien…,  trabajando sin preguntarnos quiénes somos. Trabajan y nos atienden para salvar nuestras vidas; y por el otro lado están quienes viven inconscientemente pensando que el virus no va con ellos, llenando calles, playas… saltándose normas y recomendaciones, ¿qué cambio esperamos que llegue?

   Impotente ante la irresponsabilidad de quienes “quiero pensar actúan inconscientemente”, toman decisiones desde cualquier cargo, posición o de los que vamos a pie. Estos días he de huir de las imágenes que nos ofrecen las televisiones, los debates  y las opiniones en distintos medios, para acurrucarme en la música que me trasporta, con su melodía, la paz y la esperanza que no quiero me roben todos quienes están en la otra cara  de la moneda.

3 preguntas que pueden CAMBIARTU VIDA – ÁLEX ROVIRA

  • DUELO POSPUESTO O RETARDADO, por ROSA M.

   El modo de vivir nuestro duelo depende de cómo somos, de cómo es nuestro entorno y de qué tipo de circunstancias nos rodean.

   Si tenemos esto en cuenta veremos que hay dos opciones ante el momento del duelo:

  • esperar a que el tiempo lo cure todo; o
  • buscar ayuda.

    Muchos hemos pensado en un primer momento que si la Humanidad lleva naciendo y muriendo desde el principio de los tiempos y si siempre ha habido personas que han perdido a algún ser querido, familiar o amigo, y han superado esos momentos, nosotros éramos capaces de hacer lo mismo. Creemos de modo pueril que vamos a poder con ello y que no vamos a ser menos que los demás. Yo también creí que podría hacerlo sola y… me equivoqué.

   Pensé en amansar mi dolor trabajando mucho más, más horas, con más actividades a un ritmo frenético sin apenas descansos. Si quedaba algún hueco de tiempo buscaba aún más actividades. Creía que así acallaba el dolor en una especie de carrera hacia adelante que no me llevaba a ninguna parte.

    Así estuve un año entero, un año muy duro y agotador, hasta que unos buenos amigos me hablaron del Grupo de Duelo, al que acudí por cortesía hacia ellos y por no defraudarlos.

    Acudí con una cierta curiosidad para ver si me podía aportar algo y porque era consciente de que no debía posponer más mi duelo. Ese fue el comienzo.

    Allí empecé a trabajar, aprendí herramientas básicas y absolutamente importantes que me hicieron un gran bien.

    Trabajando tiempo después con distintos grupos, he visto a personas llegar a ellos casi cuatro años después del momento en que debieron empezar a trabajar su duelo. Recuerdo el caso concreto de una mujer que llegó al Grupo seis años después de haber enviudado, seis años que había vivido con un dolor intenso y hacia adentro y estaba llena de dolor y congoja sin saber cómo salir, ni qué hacer.

    Llegó Lola y le dijo: “es cierto que hace seis años que enviudaste, eso es indiscutible, pero quiero que pienses que hoy es el primer día de un nuevo duelo, porque a partir de este momento empezarás otro camino y poco a poco sabrás crear tus propias herramientas”.

   He visto a estas personas salir de ese pozo de dolor en el que habían caído, con un duelo complicado, que el tiempo no hacía más que agudizar. Personas que creían tener el dolor dominado y al venir al Grupo se dieron cuenta que lo que habían estado haciendo era tapar su dolor para que nadie lo viera, para que no molestara, para que nadie se diera cuenta y que no habían hecho nada para estar mejor.

   Acudir al Grupo es el primer paso, de ello soy testigo, para empezar un nuevo camino hacia la serenidad, la aceptación, el equilibrio perdido y la paz interior.

   Rosa María M.

  • DUELO POSPUESTO O RETARDADO, por Montse Larré.

   Según la reacción que cada persona tiene ante la pérdida de un ser querido se pueden observar diferentes tipos de duelo y uno de ellos es el llamado duelo pospuesto, también recibe el nombre de retrasado, inhibido o suprimido.

   Por lo que llevo observando en estos diez años, este duelo es con el que menos he convivido, aunque algún caso he visto.

   La personalidad de cada uno, junto con los recursos de los que disponga, el entorno social en el momento de la pérdida, marca la forma en que se va a llevar ese duelo.

    Los que hemos pasado por ese proceso sabemos que no es fácil y puede darse el caso de que podamos encontrarnos con alguien que no pueda manejar el sufrimiento y lo deja de lado sin aceptar esa ausencia. Este duelo puede enmascarar enfermedades y puede cerrar esa ventana de esperanza para poder volver a ser feliz.

    El duelo pospuesto se puede dar por diferentes motivos y circunstancias, cuando, por ejemplo, la persona que fallece es más joven y tiene hijos pequeños, el miembro de la pareja se ve obligado a una rutina en la que se ve inmersa y que no puede eludir, la educación de los hijos pequeños, la economía familiar, etc. Que por otro lado no deja que la persona se hunda y le obliga a seguir un día a día activo. En este caso al no tener casi espacio para hacer el duelo, puede que quede pospuesto.

   También se puede dar el caso de que ante esta circunstancia la persona no sea capaz de darse cuenta de la realidad y hacen un acopio de fuerzas para seguir la vida “normal” viviendo de una forma en la que niegan afrontar la realidad dolorosa, aparcando ese sufrimiento, dejándolo a un lado, evitando pensar en ello, pudiendo llegar a un bloqueo del que es difícil salir, pero lo único que se logra es posponer el duelo, no encontrando nunca el momento para afrontarlo.

   En el momento en que se plantea, ya que esa descarga emocional tan bien guardada acabará emergiendo, aunque hayan pasado meses o años, las personas se encuentran en el kilómetro 0, del que partimos todos en el momento que nos ocurre.

   Todos los duelos son difíciles, nadie está preparado para ello y el saber pedir ayuda desde el primer momento nos ayudará poder caminar de forma más adecuada y saludable tanto para nosotros como para nuestro entorno.

    Montse Larré.

  • DUELO POSPUESTO O RETARDADO, por Maria Dolors Estivill (Lola)

   Me centraré en mis vivencias en Sala.

   Hay mucha literatura, opiniones, teorías y pareceres que he leído, pero vivir en primera línea estos duelos es otra literatura tan impactante para mí, que lo trasmitiré desde mi sentir y como terapeuta.

   Durante estos años y, ante todo, siempre he intentado empatizar desde el primer momento para atender a todos los asistentes en Sala y a estos en particular que han retrasado su duelo, para que no se sintieran incómodos ante todo cuanto no han vivido en su proceso.  Si aceptan seguir en Sala deberán trabajar para desmontarles, en parte, el trabajo que con sus medios o saber, construyeron su coraza para seguir viviendo, pero, eso sí, respetándoles sus tiempos de adaptación. 

   Ellos traen un bagaje de 1, 2, 3, 4,…10 y 20 años, sobreviviendo con las fuerzas que se exigen, haciendo el camino de su proceso como pueden. Otros también  lo hacen con ayudas que buscaron y que pasado el tiempo abandonan por varias razones. A veces pienso que están cansados de muchos consejos o, simplemente, porque creen que es la vida que les ha tocado vivir.

   Así y todo continúan caminando en su mundo interior donde la mente, pasado el tiempo, es maestra y señora que les roba sus ganas de vivir y las ilusiones, haciéndose presente en ellos una tristeza con la que aprenden a seguir.

   Recuerdo un caso que después de unas tres o cuatro sesiones no volvió. La última tarde nos dijo, a última hora, que había intentado suicidarse y que su hija llegó a tiempo para salvarla del trance. No hubo tiempo para atenderla y comentarle que aquel acto lo han expuesto, durante otras sesiones, varias personas que, ante ese dolor de pérdida, piensan que al no poderlo parar con la medicación ven en la muerte una salida.

   Por eso repito una y ciento de veces que la primera hora de terapia digan, comenten, expongan cuanto piensen, sienten o vivan, pues en las dos horas restantes hay tiempo para reconducir el tema.

   No fui detrás, ni la llamé. Sabía que estaba en manos de un psiquiatra y no quise interrumpir un trabajo que era atendido y tratado por un profesional.

   Todos saben que pueden entrar y salir cuando ellos quieran del Grupo, son adultos y jamás les llamaré si dejan de asistir. El Grupo está abierto para acoger, compartir y trabajar el duelo y conseguir un día u otro, las herramientas y recursos que cada uno de ellos tiene y que sólo ellos, con  ayuda y tiempo, lo conseguirán.

   Cada 15 días, y si vuelven a la terapia, trabajo con su presente pero teniendo en cuenta  lo que me comentaron en su día, porque todo cuanto verbalizan se ha de trabajar con delicadeza y respetando sus tiempos.

   Generalmente la mayoría tienen dificultad al enfrentarse a los sentimientos de perdida después de pasado el tiempo. Esta dificultad no desaparece por arte de magia, porque está impregnada en cada célula de su ser y cuando simplemente intentas acariciarlos, al principio, intentan huir hasta que un día las fuerzas dejan de acompañarles viviendo una angustia que debes saber acoger, darles la mano, tu experiencia, tu seguridad y tu mimo para que rompan su coraza forjada en años y puedan enfrentarse a una realidad que les asusta y le temen.

   Aún no he encontrado el interruptor para desconectarles este sufrimiento que tantos y tantos años llevan consigo en un instante, pero si se dan ese tiempo, les acompañaré hasta que vuelvan a sonreír.

   Entiendo que cuando llegan por primera vez y les comentas que han de empezar el camino casi desde el km. 0 con las primeras asignaturas que deben reconocer y trabajar, sé que no les es fácil.

   Negar la realidad del sufrimiento se hace insoportable cuando se ha de seguir  sobreviviendo automáticamente, porque lo demanda su vida y nuestra sociedad.

   Hoy quiero finalizar con otro caso y un cuento que le abrió el ¿por qué? no cerraba su duelo.

Cuento reflexión¿Y tú, cuál de los tres eres? ¿Zanahoria, Huevos o Café? De Google

   Una vez escuchado el cuento reflexión, comento lo siguiente:

   Ella se dio cuenta que cuando murió su hijo, se quedó como una zanahoria, pero sacó fuerzas  que no tenía durante tres años y dejó de llorar para seguir con su vida, con su dolor no compartido y con el mejor disfraz para que nadie sufriera por ella.

   Llorar es bueno. Es una manera de verbalizar los sentimientos a los que no les podemos poner palabras.

   Más tarde la tristeza los aísla, a veces, incluso estando acompañados, y se endurecen contra el mundo que les toca vivir y jamás llegan a hacer un buen café.

   Quizás en un principio este duelo postergado, retardado, pausado, …es una herramienta de defensa, pero es mi creencia que trabajar un duelo es bueno y necesario, si queremos volver a sonreír a un mundo que nos pide aprobar una asignatura compleja y no fácil de sacar buena nota.

Maria Dolors Estivill ( Lola)

PABLO LÓPEZ – El mejor momento ( Lyric)

   Fins el proper divendres dia 11 de juny de 2021.

      Un abrazo. Una abraçada

      Maria Dolors Estivill Martínez (Lola)

Deixa un comentari

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

Esteu comentant fent servir el compte WordPress.com. Log Out /  Canvia )

Twitter picture

Esteu comentant fent servir el compte Twitter. Log Out /  Canvia )

Facebook photo

Esteu comentant fent servir el compte Facebook. Log Out /  Canvia )

S'està connectant a %s

A %d bloguers els agrada això: